El sitio web "EL REDACTOR 21" publicó la nota de Juan Ignacio Bossi a José "Popeye" Bronzone, cuyos conceptos principales reproducimos a continuación (Foto del mismo sitio).
Entrevistamos al ex boxeador cordobés y entrenador profesional José “Popeye” Bronzone, en su espacio de trabajo que se ubica en el Gimnasio Municipal de la Casa de la Cultura. Nos recibió gentilmente, luego de que terminara de practicar golpes con su pupilo Agustín Agüero, “Descansa y come, nos vemos mañana Agustín”, son las palabras de despedida para el niño promesa. Mientras enciendo el grabador, "Popeye" se acomoda en su silla para conversar largo y tendido sobre los logros en su carrera profesional, los títulos que consiguió y la labor que está llevando en el presente.
- ¿Cuándo comenzaste?
- Empecé a los 12 años en San Francisco y boxeé hasta los 27. El boxeo ha sido y es parte mi vida, puedo decir que la mitad de ella estuvo adentro de un gimnasio. En el amateurismo boxeé en categoría liviano (N. del E.: Hoy Hasta 60 Kg.) y luego cuando pasé al profesionalismo en Welter Junior (N. del E.: Hoy Superligero).
- Repasemos un poco la historia, contanos de aquellos años en el profesionalismo.- A los 20 me hice profesional, competí 7 años en el alto nivel y tuve muy buena campaña con 54 peleas, varias ganadas y 4 perdidas solamente. Logré ser Campeón Provincial en dos categorías distintas, en Welter y Welter Junior.
Sin tomar la suficiente dimensión de quien tengo en frente, tal vez por una cuestión generacional, sigo preguntando a medida que José despide a sus estudiantes, niños de 10 a 12 años, adolescentes y adultos tanto varones como mujeres que encuentran en la disciplina un lugar para la recreación y el entrenamiento corporal.- ¿Una pelea que recuerdes?
“La última como aficionado en la Federación Cordobesa de Box contra "Látigo" Coggi para clasificarse a los Juegos de Moscú. En fallo muy polémico me la dieron perdida, pero de todos modos hubiera podido ir, lo que paso es que ese año se dio el boicot de los Estados Unidos a Rusia y no pude ir”. Recuerda con cierta nostalgia.
- ¿En cuanto a títulos y conquistas?
- Llegué a estar primero en el ránking nacional y séptimo en el ranking mundial, además me consagré campeón dos veces de la provincia de Córdoba. En la fotografía donde me ves festejando con los muchachos fue cuando gané el titulo Welter Junior ante José "Moñito" Nuñez de Río Segundo.
- ¿Es verdad que llegaste a pelear en el Luna?
- Sí, peleé dos veces en Luna Park. Una fue un miércoles a la noche, cuando se hacían las veladas de los "Miercoles a la noche de Box". El haber formado parte del equipo de Juan “Martillo” Roldán me dio la dicha de estar en Buenos Aires, pelear también en la Federación Argentina de Box y conocer a mucha gente del ambiente, "Tito Lectoure", Cherquis Bialo. Además estuve como pupilo de Almícar Brusa.
- Hablando con la gente te siguen reconociendo ¿Lo sentís así por mas que haya pasado el tiempo?
- Cuando circulo por las calles de Córdoba, San Francisco o Devoto, la gente todavía se acuerda de mí, dice ¡Ah, Popeye Bronzone!. Conservo los mejores recuerdos, el boxeo me permitió acceder a lugares impensados, inimaginables, poder estar con personas con un impronta fenomenal.
- ¿Aquella experiencia como la traés a la escuela?
- Uno ha aprendido y se ha rodeado con todo el mundo boxístico, ahora en esta faceta de la escuela venimos muy bien, conseguimos lo que queríamos, repercusión y que se acerque la comunidad. También tenemos el apoyo de las autoridades municipales, así que vamos bien.
- En cuanto a los pibes que quieren competir en el box ¿Qué cambios percibís de aquel tiempo a este?
- Hay poco apoyo y se debe a que no nacen valores que convoquen. Son años difíciles para los deportistas amateurs, no es tarea fácil conseguir auspiciantes. Cuando yo peleaba tenía dos publicidades, la yerba Cbse y La Paulina, una me servía para pagar el hotel y la otra la comida, luego lo que ganaba en el combate me quedaba para mí. Pero a decir verdad la actualidad es compleja.
- ¿Crees que ha retrocedido el boxeo nacional?
- Creo que se ha estancado un poco. Los chicos hoy para entrenar, necesitan trabajar y para boxear tenés que dedicarle tiempo completo en el gimnasio. Es un deporte lindo pero duro y sacrificado.
- Sentís que tiene factores positivos, como sacar a los chicos de la calle para que encuentren un espacio de contención y además aprendan un deporte.
- Los gimnasios de box están perfectos y los chicos tienen que hacer un deporte. No se si es sacarlos de la calle, creo que con el gimnasio hemos logrado que aprendan valores y práctica de la disciplina.
- Me decías que es un deporte duro que precisa horas y horas de exigencia para estar bien arriba del ring ¿Cómo se manejan esos esfuerzos?
- No es fácil, por un lado es difícil generar la responsabilidad que lleva el entrenamiento y por otro, el cuidado personal, si quieres ser boxeador tenes que vivir para esto y olvidarte de la noche, de la joda. Hay un dicho muy cierto de Ringo Bonavena, vos te subís al ring y hasta el banquito te sacan y es una gran verdad, te cansás y te pegan hasta debajo de la lengua. Hay que estar 100 % físicamente, mentalmente y anímicamente para no dar ventajas.
- ¿Qué características debe tener un buen boxeador?
- Yo creo que en la vida se nace y como todo, también en el boxeo hay que tener buenos genes, eso no se le puede inyectar a nadie, eso se nace. Como en cualquier actividad de la vida existiendo condición se puede perfeccionar, pero no hay una vacuna para colocar genes.
- ¿A qué edad es recomendable empezar a practicarlo?
- No hay una edad digamos, vienen chicos de 10 a 12 años y es una linda edad, pero no podés competir y eso por ahí los desmotiva. (N. del E.: No puede competir en combates, pero sí sin contacto)
- Contame del púgil que está haciendo sus primeras armas, si tenés que describirlo a Agustín Agüero ¿Cómo lo caracterizarías?
- La verdad es que lo veo muy bien en todos los aspectos, hay que considerar que tiene apenas 14 años. Es fundamental ir de a poco. Posee condiciones muy buenas, camina el ring con velocidad y goza de mano pesada, es un gran fajador.
- Ahora que te toca vivir los combates desde afuera del ring, ¿Cómo vivís las veladas?
- Estoy tranquilo y contento. Ahora para competir tengo solo a Agustín y creemos que esta por el buen camino. El tema de las veladas, tengo que agradecer a la gente de Devoto, cada vez que hemos organizado un espectáculo siempre respondió y pago su entrada, eso es muy importante para los chicos así que estoy feliz.
