El diario "PUNTAL", en su versión digital, publicó la nota a Juan Manuel Taborda que reproducimos a continuación (Foto del mismo medio).
Juan Manuel Taborda es nuevo campeón Latino O.M.B. de la categoría mediano. Es un boxeador distinto, con enormes condiciones, y con destino internacional.
Pero por sobre todas las cosas es un deportista. “De chico me gustó el judo, y fui campeón argentino. Me ayudó ese roce para el box, aunque me identifico con aquello que el boxeo es el arte de pegar y que no te peguen”, afirma.
Con 16 combates profesionales, todos ganados, y 9 por la vía rápida, se insertó entre los 13 mejores del mundo. “Voy paso a paso, y sueño con llegar a lo máximo y quedar en la historia, pero hay que estar preparado al 100 % para ir en busca de un título mundial, y al mercado internacional”.
El sábado venció por puntos en fallo unánime de los jurados al mendocino Abraham Buonarrigo, tras un impasse de 1 año, 7 meses y 10 días. A sus 28 años afirma que “es mi mejor momento, me siento fuerte, seguro y maduro. Cada paso se ha dado en mi carrera como correspondía, y estoy listo para ir por más, aunque a eso lo decidirá mi promotor Arano, mi padre y mi entrenador (Diego Sívori). Yo me dedico a entrenar para ganar cada pelea, y no me la creo. Soy un boxeador más de Villa María, y trataré de quedar en la historia del deporte de la ciudad. Quiero seguir progresando, y ojalá pueda pelear por un título mundial en algún momento”.Su carrera bien cuidada necesita pruebas de nivel internacional tras el triunfo 16, pero Taborda insiste en que “si me toca pelear por el título argentino, también será un desafío que me motivará. Obtuve el título Latino C.M.B., pero el Latino O.M.B. me dará más proyección, y sumar títulos otorga más respeto”.
Su categoría es la misma de Carlos Monzón, Hugo Pastor Corro, Jorge “Locomotora” Castro, Mario Carrera, Héctor Velazco o Sergio “Maravilla” Martínez. Va tras sus pasos, con mesura. “Sé que para estar en ese nivel hay que dedicarse a pleno. Yo hoy tengo mi trabajo familiar, y aunque no me impide entrenar, hay que ser 100 % profesional para llegar a ese nivel. Quizás ahora se pueda abrir esa posibilidad. Veo que es posible”.
UN REGRESO DE ALTO VUELO
Con respecto a su regreso dijo: “Si bien hacía mucho que no subía a un ring, no paré nunca de entrenar. Sin pelear, no me faltó guanteo. Estuve en Alta Gracia dos semanas entrenando a full en triples turnos, con mucho guanteo. Me había preparado para volver, nunca dejé de entrenar, y le sumé horas de trabajo en las últimas dos semanas para preparar la pelea”.
Mostró su alta gama de recursos boxísticos ante un adversario que había ganado 9 peleas, 7 de ellas por nocaut, y había perdido 1. “Fue una muy buena prueba. Fue un rival difícil, de una muy buena escuela como la mendocina, con Pablo Chacón en el rincón. Venía de ganar un título Fedebol de la A.M.B., en una categoría más pesada que la mía. Tiene una carrera respetable, con varios nocauts”.
Explicó que “siempre utilizo los dos primeros asaltos para estudiar al rival. Más que ese año y medio sin combatir, quería ver sus combinaciones de golpes, su potencia, y como se mueve”.
Taborda aseguró que “siete u ocho rounds fueron nítidos a mi favor. En el cuarto lo tuve para el nocaut, pero no tuve la suerte de encontrarlo con una mano más. Lo encontré con una combinación de golpes, y me parece que tocó la lona con la rodilla. En el quinto también sintió mis manos, y en el sexto lo castigué mucho”.
Explicó que “en el séptimo lo tuve. Lo vi frustrado, le mostré que no sentía sus manos, y él salió a pegar en el octavo, pero no sentí sus golpes. Estuve muy tranquilo”.
Remarcó que “lo vi sentido varias veces, incluso en el final, pero no quise desbocarme, porque iba ganando la pelea, y si él tiraba una mano y me pegaba en la pera, me podía caer. Ya no era momento de arriesgar todo lo que había construido”.
En 2019 había logrado el título Latino C.M.B., pero el Latino O.M.B. le pareció “más valioso. El boxeo es el arte de golpear y no dejarse golpear. Me noto más sereno, maduro y convencido en que la estrategia y la inteligencia es clave en el box”.
Destacó que “me gusta que el rival se desgaste, que se frustre, y después atacarlo en donde más le duela y te permita golpearlo. Hay que elegir con inteligencia”.
Indicó que “fui de menor a mayor con el jab de izquierda tomando distancia, pero también lastimando. En el tercer round le noté el ojo derecho rojo e hinchado. El cross derecho lo usé bien, y si en vez de pegarle en la sien, le pegaba en el mentón, lo tiraba en el cuarto, y en el séptimo también”.
LA GUARDIA BAJA, COMO ESTRATEGIA
Consideró que “bajo la guardia asumiendo riesgos, como estrategia para invitar a pelear al rival, y contragolpear. Lo sorprendí. Me habían visto en vídeos, pero no me encontró en todo el combate”.
El invicto villamariense dijo que “es frontal, y el jab le entró siempre, al igual que el cross derecho”.
Agregó que “fue un rival duro, y superé una buena prueba. Me llamaron para pelear afuera, pero sin tiempo para prepararme no acepté, porque hasta es complicado si no sabés si vas a dar el peso. En esta pelea llegué muy cómodo al peso”.
Insistió en que “con tiempo de preparación, peleo dónde quieran. No dejo de entrenar, pero para una pelea internacional, necesitaré más tiempo de preparación. En Argentina es difícil estar 100 % dedicado al deporte. No se vive con estas bolsas. Si me toca ir afuera, será diferente mi dedicación”.
Aclaró que “me metí entre los 13 mejores. Me veo enfrentándolos”.
Recalcó que “Arano confió en mí. Me llevó bien, y si salen buenas propuestas afuera, iremos por más. Brian Castaño le ganó a Charlo, lo vimos todos. Afuera es más difícil, pero hay un proceso de aprendizaje, e ingresar entre los 13 mejores del mundo, hará que me respeten. Si gano el título argentino me servirá. Si hay una propuesta seductora afuera, también me animo”.Taborda ya tiene vuelo internacional. “No le temo a nadie. Ahora saldrán más peleas y me prepararé para ganarle a todos”.