martes, 23 de enero de 2018

GUSTAVO BALLAS: "EN MARZO ARRANCO CON EL SECUNDARIO"


El Diario Deportivo "OLÉ" publicó la nota de Mauro Mariani a Gustavo Ballas, que reproducimos a continuación (Foto del mismo medio).

Ver un objetivo sin cumplir y querer cerrar el círculo. A Gustavo Ballas lo que le faltaba para sentirse completo era avanzar con sus estudios. Aunque terminar la escuela a los 59 años es un desafío mayor que en la adolescencia, el cordobés tomó el camino.
“Fue una iniciativa propia, una cuenta pendiente. Yo dejé de estudiar porque en aquella época era estudiar o trabajar”, señaló el ex campeón mundial. Y continuó: “A mí me gustaba ir a la escuela. Hice hasta quinto grado y un día mi padre me llamó para avisarme que tenía que empezar a laburar. A esa edad me convertí en un vendedor de la calle. Vendía peines, curitas; me encantaba, era bueno. Yo soy un viajante frustrado. A los 12 años empecé a vender en los pueblos cercanos, salía de Villa María y viajaba a dedo”.
Pero la motivación para terminar sus estudios surgió de su rutina. “Yo trabajo con un equipo médico en ATILRA, el sindicato de los empleados lácteos. Hice dos capacitaciones: una en la Universidad del Salvador y la otra en la Universidad Nacional de Córdoba. Cuando se armó el equipo, nos reunimos una vez por mes para evaluar a los pacientes, cada vez que los escuchaba me sentía muy chiquito, me preguntaba qué hacía. En otra reunión, entré motivado y los miré y dije: ‘yo puedo ser como ellos, es cuestión de estudiar”, relató Ballas, quien descree que la edad sea un límite para cumplir metas.
“No permito que una persona me diga que ya está grande para esas cosas. El mes que viene cumplo 60 años, pero yo me siento de 23, como cuando gané el título del mundo; todavía me queda mucho por hacer”, aseguró el cordobés, que también tiene pensado su futuro.
“Mi idea es seguir con Psicología. En marzo arranco el secundario, pero la etapa más difícil ya la pasé. Yo hacía 50 años que no entraba en la escuela, que no agarraba un libro, un cuaderno, y no me resultó tan díficil. Lo mejor está por venir. Si todo sale bien, haré el secundario en tres años y después estudiaré Psicología en la universidad”, cerró.