El diario local "LA MAÑANA DE CÓRDOBA" publicó una nota de Gabriel Silva a Pablo Sarmiento, en la previa a la pelea de "Maravilla" ante Cotto en junio, que reproducimos a continuación.
La vorágine que vive el centro de Córdoba un mediodía de viernes previo a un fin de semana largo, parece no afectarlo. Él mantiene la misma tranquilidad que se estila en su pueblo, Las Varillas, y el escenario de esta charla de café podría ser Buenos Aires, Madrid o Los Ángeles, y seguramente estaría igual: tranquilo, pensando cada una de las palabras que dice.
El que dialoga con PODIO es Pablo Sarmiento, el dueño del rincón de Sergio “Maravilla” Martínez, el tipo que revolucionó a fuerza de talento y carisma el boxeo argentino. Lo conoce como pocos y, tal vez por eso, siempre que se refiere al campeón mediano del C.M.B. lo llama Sergio, nunca por el apodo con que se lo reconoce al pugilista zurdo de acento neutro.
Precisamente, la forma de hablar del quilmeño, será una de las pocas ocasiones para que Sarmiento se suelte: “A veces habla inglés, pero se le termina mezclando todo: español, italiano...”, dice con una sonrisa, mientras otro de los integrantes de la mesa del bar de Maipú al 200 le recuerda como “lo gastan” a Martínez con la reiteración del “You know...” (Tú sabes).
Igual, nada lo entusiasma más que hablar de boxeo, y por eso se guarda todo para el instante en el que se encienda el grabador. Con su look habitual de sombrero y anteojos de sol oscuros, se acomoda en la silla y comienza: “Llegué ayer (por el jueves) de Buenos Aires donde estuvimos con la conferencia de prensa de Sergio y estamos muy contentos por todo lo que se viene”.
El futuro inmediato tiene una fecha clave en la agenda: 7 de junio. Esa noche, Martínez se medirá en el mítico Madison Square Garden de Nueva York con el puertorriqueño Miguel Ángel Cotto, en lo que será la segunda defensa del cinturón conseguido en setiembre de 2012. “Está todo muy bien, estamos trabajando muy bien. Lo veo a Sergio muy bien de ánimo y de las lesiones está completamente recuperado, con muchas ganas de que llegue la pelea de junio”.
"Saber que después de la pelea de Sergio, el Madison será demolido es algo que nos motiva aún más. Nos llena de placer poder ser protagonistas de la última pelea en ese escenario mítico”, dice Pablo Sarmiento.
La tarea de combinar promoción con entrenamiento, postergará la parte más intensa de éstos últimos. Además, Sarmiento viajará a Japón con otro de sus boxeadores, el español Francisco “Kiko” Martínez, para la defensa del título gallo F.I.B. ante el local Hozumi Hasegawa el 23 de abril.
“Cuando regrese me sumaré al trabajo en Miami”, dice sobre el reencuentro con “Maravilla”, quien por estos días prepara la pelea con Gabriel, hermano de Pablo y recientemente reincorporado al team.
- En una simple lectura previa, arrancan con una ventaja que es la altura de Sergio con respecto a Cotto...
- Con Cotto vamos a tener como ventaja inicial la altura, a diferencia de lo que pasó con (Martin) Murray o con (Julio César, hijo) Chávez, donde ellos también le llevaban unos ocho o 10 kilos de ventaja. Esperamos que se pueda llevar a cabo el plan de la pelea y que Sergio pueda hacer bien su trabajo.
La reincorporación de Gabriel al equipo de “Maravilla” también es algo que conforma a Pablo y se le nota en el rostro cuando habla de su hermano: “Estamos todos muy contentos porque se hayan vuelto a encontrar. Todos saben lo que él conoce a Sergio y lo que puede aportar desde el entrenamiento”.
Gabriel cumplió una condena en distintas cárceles, y a la llegada de Martínez a España, había tenido un papel fundamental en la formación boxística del quilmeño. Por eso, con el reencuentro, la sensación latente es que el círculo comienza a cerrarse de manera perfecta: el sueño de un grupo que llegó a lo más alto desde España y que espera coronarlo en el Madison Square Garden ante Cotto.
