jueves, 7 de septiembre de 2017

BRENDA ÁVALOS: "EL AÑO QUE VIENE QUIERO INGRESAR EN EL PROFESIONALISMO"


El sitio web "PUÑOS CORDOBESES" publicó la nota de Raúl Trivellini a Brenda Ávalos que publicamos a continuación.

Tardecita de Lunes , rostro sonriente, muy feliz con el cinturón en la mano nos salió a recibir, no podría ocultar su alegría.
- ¡Felicitaciones Campeona!
- Gracias por tenerme en cuenta, gracias por venir.
- Me imagino feliz, esperabas este cinturón?
- Si. La verdad que si, hago mucho esfuerzo para esto, soñaba con el título. Mucha gente no creía en mí, pero yo estaba segura que lo iba a lograr.
- Contanos tus inicios, tu vinculación con el boxeo...
- Me crié en barrio Villa Libertador con mi papá, mí mamá y dos hermanas mayores que yo. Siempre fui de jugar bruto, tenía más amigos varones con los que jugaba al fútbol y todos juegos de hombres, nunca una muñeca (risas)... Cuando cumplí 11 años mi abuela (madrina) me llevó a un humilde gimnasio de Barrio Comercial en donde daba clases el Profesor Víctor Vargas. Estuve muy poco tiempo con él, hasta que conocí el Polideportivo Corral de Palos, donde enseñaban Carlos Tello y Alberto Gómez. Alberto Gómez fue quien me hizo, me enseñó todo lo que sé.
- ¿Y ahí comenzó tu carrera boxística?
- Si. Era duro porque mi papá no tenía trabajo fijo y yo me tomaba 4 colectivos diarios, pero no faltaba un día. A los 14 años debuté como amateur y empate. De ahí seguí peleando siempre con Alberto Gómez, que es un excelente técnico, él me sacó campeona interprovincial. Después de unos 5 años aproximadamente se cambió de gimnasio y empezó a dar clases en santa Isabel (Club S.I.C.A.) y también lo seguí hasta ahí, hicimos muchas peleas, 50 en total, luego él se volvió a cambiar de lugar y ya no pude seguirlo.
Dejé 2 años y empecé con el Profesor Eduardo Ibarra, estuve 8 meses con él. Fuí convocada por el Profesor Ledesma para formar parte de la Selección Argentina, estuve con "las Toritas" en el Ce.N.A.R.D.
Volví, pasó un tiempo y decidí tener familia, dos hijitos: Ciro (4) y Erick (3). Paré por 5 años porque era súper complicado entrenar.

- ¿Cinco años? Si bien sos joven, con dos hijos, el boxeo estaba muy lejos en tus planes para regresar, digo, o nunca te lo sacaste de la cabeza?
- Te digo que volver fue lo más difícil de mi vida, ya que tenía muchísimas trabas. Nadie me apoyaba ni me tenían a mis hijos dos horas para que yo pudiera seguir. Tuve que pagar para que alguien los mirara dos horas, fui a Villa El Libertador a un gimnasio y ahí conocí a Octavio Molina (lo mejor que me pasó), me aconsejó, ayudó y prometió sacarme campeona. Siempre me escribía preguntando cuando iba a empezar a entrenar con él. De la villa me mudé a Parque Santa Ana, peor aún la distancia, más imposible se me hacia venir Córdoba. Tuve que ponerme firme, pelear con mi familia hasta que entendieron que esto es lo que quiero, lo que amo y para lo que nací.
- ¿Hace cuánto que entrenás con el Profesor Molina?
- Hoy recién hace 2 meses que estoy con Octavio y ya soy doble campeona (argentina y provincial). Te digo que es un sacrificio enorme y muy difícil venir todos los días de Santa Ana a Córdoba, se hasta mucho pero vale la pena. ¡Muchos se rieron y hablaron de mi cuando dije que volvería a boxear y acá me tienen mejor que nunca!
- ¿Una buena experiencia fue el Nacional de Bialet Massé donte te consagraste Campeona Argentina?
- Si, realmente si, el sacrificio fue el doble. El Nacional también fue difícil ya que tuve que llevar a mis hijos y tenerlos en una pieza chiquita y con mucho frío. Pero todo valió la pena, le gané en la final a Dayana Da Silva de Misiones, otro momento imborrable, muy emocionante, muy feliz.
- ¿Qué significado tiene este título para vos?
- Este título es fruto del sacrificio que hago día a día. El destino dijo que yo no iba a boxear más, pero le hice la contra. La historia la escribimos nosotros.
- ¿En quién fué o fueron los primeros qué pensaste cuando el fallo del jurado te dio ganadora y el árbitro levantó tu brazo?
- En mis hijos, son mis sontén, los amo, por ellos hago lo que hago. Todos decían que ellos serían un impedimento para que yo boxeara, pero al contrario, ellos son mi motor.
- Una dilatada carrera amateur, ¿la próxima meta es el profesionalismo?
- Hacia allá vamos, esa es la idea. Un par de pelas más y el año que viene si Dios quiere ingresar en el profesionalismo. Primero quiero ir por el título de los 75 kg. que está vacante.
- ¿Qué les decís a las chicas que se quieren iniciar en el boxeo?
- Que el boxeo cambia vidas, es el deporte más hermoso que hay, que se animen a empezar. No es para nada violento, arriba del ring se pelea y abajo seguimos la vida normal.
- Te traigo de nuevo a la pelea del viernes. Te tenías mucha fe el viernes, sabías que era tu momento?
- Sin ir más lejos el viernes cuando peleé con Jésica Roqué estuve en el vestuario de ella charlando minutos antes de salir (nos conocimos en el Nacional y entablamos una linda amistad).
Muchísima fe me tuve, entrené duro para esa pelea.
Imagínate que el viernes cumple años mi hijo y ella va a traer a sus hijas y de ahí nos vamos juntas al club porque íbamos a pelear de nuevo, pero la pelea se cayó. Esto es el Boxeo. Esto no se ve siempre
. (risas)
- ¿Cómo viste la pelea? ¿Salió como la programaste?
- A la pelea la estudié en mi cabeza desde hace dos semanas atrás. Me acostaba y la imaginaba: Lo que tenía que hacer, qué ventajas tenía. Y salió todo como lo planeé. Nunca había peleado a 4 rounds. Fue poco el tiempo de entrenamiento, pero agarré bastante aire.
- ¿A la hora de los agradecimientos de quiénes nos acordamos?
- Principalmente de la gente que me decía que no podía, que el boxeo no era para mí. Por eso lo de la foto. A mis técnicos Octavio Molina y Leonardo Luna, que siempre están ahí exigiéndome y solucionando mis problemas para que pueda entrenar.
- Brenda, un mensaje final a la afición del boxeo.
- Que Brenda "la Pirata" Abalos volvió por todo más fuerte que nunca...
- Gracias "Pirata" y que sigan los éxitos.
- Te agradezco a vos Raúl por todo lo que haces por el boxeo de Cordoba, sobre todo lo que recién comenzamos.