El matutino deportivo "Olé", publicó en su edición de hoy una nota de Ernesto Rodriguez referida al fallecimiento de Carlos Alberto Tello, la que reproducimos a continuación.
Carlos Tello murió en Córdoba a los 62 años. Guió a Omar Narváez a su primer título mundial.
Calentón, pedagógico, apasionado, derecho. Carlos Tello fue un bicho del boxeo que se brindó a pleno a sus dirigidos y que si se separó de varios de ellos fue, justamente, cansado de pelear por sus derechos contra los dueños del circo. El gordo Tello murió ayer, a los 62 años, víctima de un cáncer que lo tuvo a mal traer en los últimos tiempos.
Desde su Córdoba natal llegó a mediados de los '90 a la Selección amateur, a hacerle la segunda a otro prócer: el cubano Sarbelio Fuentes. Juntos estuvieron en el rincón en Atlanta, guiando a Pablo Chacón a su bronce olímpico en 1.996. Y forjaron aquel equipazo que logró podios mundiales y panamericanos, con talentos como Omar Narváez, Mariano Carrera, Hugo Garay, Israel Pérez y Víctor Hugo Castro, probablemente su futuro continuador en la tarea docente.
En el 2.001, Tello abrió el Gimnasio Corral de Palos en el que guió en sus primeros pasos profesionales a sus estrellas aficionadas. El chubutense Narváez fue el primero en coronarse, un año más tarde, cuando se ciñó el título mosca O.M.B. en el Luna Park. La relación con el Huracán se extendería hasta el 2.007, período en el que el patagónico hizo nueve defensas. También llevó al porteño Carrera a su breve reinado de campeón mediano A.M.B. Y con el Pigu Garay disputó dos veces el cetro mediopesado O.M.B.
