El diario "La Capital" de Rosario publicó en su Suplemento digital "Ovación" la nota a Alejandra Oliveras que reproducimos a continuación.
La trayectoria de Alejandra Oliveras es tan interesante como su historia, reveladora de la realidad del boxeo femenino. A un día de su tercera defensa del título mundial pluma O.M.B., contra la colombiana Paulina Cardona, en el estadio cubierto de Sportivo América, comparte una charla con Ovación en el hotel Howard Jhonson. Es un sitio que en cierta manera le resulta familiar. En Santa Fe vive en un hotel que sponsorea su carrera. Pese a los años que lleva sobre el ring, y a sus antecedentes, no le sobra nada. Por tal motivo, no piensa entregar lo que logró con esfuerzo. "Voy a defender el título con mi vida", asegura la Locomotora.
"El boxeo es muy duro, con muy poco apoyo. Hay que remar en el asfalto. Para ser campeón debés tener un corazón enorme", sostiene Oliveras, ganadora de la corona del mundo este año, con un triunfo ante la mexicana Jéssica Villafranca.
"¿Si tengo problemas económicos? Más que eso, son catastróficos. Además de boxear, trabajo para mantener a mis dos hijos (de 15 y 18 años) como instructora de aerobic, aerobox y de boxeo femenino. No tengo casa, ni un terreno. Es injusto. En el boxeo argentino, tanto en hombres como en mujeres, soy la única campeona del mundo en tres categorías diferentes. Y la única del mundo de mi sexo que lo consiguió", señala.
"Los varones ganan millones y las mujeres unos pocos pesos. Es una discriminación grande", dice con fastidio la jujeña, cuyo entrenamiento diario lo realiza en Olimbox, gimnasio santafesino que le facilita su propietario, Osvaldo Salami.
Oliveras reside en un hotel de Santa Fe y sus hijos varones viven en Córdoba junto la hermana de la boxeadora. Oliveras no sólo reclama mejores bolsas sino que les pide a los gobernantes un reconocimiento como campeona. También pretende combatir en el exterior para tener un buen premio económico.
En lo inmediato, mañana enfrentará a Paulina Cardona. "Conozco poco de ella. Peleó con varias campeonas mundiales. Lo que puedo decir es que cuando a una le dan la chance de pelear por el título, pone su vida entera arriba del ring. Y yo como campeona, voy a defenderlo con mi vida", afirma.
La presencia de la Locomotora será la segunda en Rosario. En 2006 defendió por primera vez, con éxito, el título supergallo frente a la colombiana Anays Gutiérrez Carrillo. Poco conforme con su actuación, apenas se leyó la tarjeta de los jurados, explicó al público su flojo rendimiento en que se estaba "cagando". "¡No sabés lo que me costó decir eso!. No sabía que todavía seguía la transmisión de TV. Todo fue por haber comido ensalada de fruta y helado. Esta vez no pienso comer lo mismo", dice entre risas.
