En la noche de este lunes, a las 21,15 hs. falleció, en el Sanatorio del Salvador, donde se encontraba internado luchando contra una durísima enfermedad, el Presidente de la Federación Cordobesa de Box, José Emilio Graglia.
"Pepe" fue presidente de la F.C.B. desde el año 1992, integrando la institución desde hacía 40 años. Además, durante ese mismo tiempo fue parte del Consejo Directivo de la Federación Argentina de Box, en la que llegó a ocupar la Vice-Presidencia. Igualmente, era un dirigente histórico de la Asociación Mundial de Boxeo, con 34 años en su Directorio y habiendo ocupado los cargos de Vice-Presidente y Presidente de Fedelatin.
Dirigente por vocación y dones naturales, había ejercido ese mismo rol en distintas intituciones, tanto políticas como gremiales y vecinales, destacándose siempre por su entusiasmo y honestidad.
Consecuente con sus ideas, no dudaba en expresarlas en todos los ámbitos en que se desempeñó, con la sabiduría que otorgan los años y la experiencia.
Recorrió el mundo con el boxeo, llevando a todos lados su carisma con el que cosechó muchísimos amigos y afectos.
Varias generaciones de dirigentes, técnicos y deportistas tuvieron oportunidad de conocerlo a José Graglia, habiéndose ganado permanentemente su respeto, por lo que se había convertido en un sinónimo del boxeo de nuestra provincia.
Su trayectoria le mereció múltiples e importantes distinciones, muchas de ellas de la Asociación Mundial de Boxeo, a la que consideraba su familia.
Su fallecimiento es un durísimo golpe para quienes hemos trabajado con él en el desarrollo de este deporte que tanto amamos y para quienes tuvo, en su despedida, un último mensaje: "Bueno muchachos, ahora sigan ustedes y hagan esto grande", dando una muestra final de su vocación de dirigente.
Quienes integramos la Federación Cordobesa de Box, habiendo recorrido tanto camino con nuestro Presidente y amigo, sentimos este legado como un firme compromiso de no defraudar su confianza, continuando el camino por él trazado, aún sabiendo que el vacío que produjo su desaparición será imposible de llenar y que su presencia orientadora permanecerá viva.
Queremos, en este sencillo mensaje, expresar nuestro dolor por esta lamentable pérdida, acompañando a sus familiares y seres queridos en el sentimiento, haciendo votos para que el tiempo sea consuelo de la tristeza que compartimos.
