El sitio web de "EL MILENIO" publicó la nota de Josefina Zilioli, Joaquín Aguirres, Martina Maldonado y Kiro Cancinos a Santiago Tulián, que reproducimos a continuación (Foto del mismo medio).
Cuando, a sus 16 años, Santiago Tulián asistió a una clase de boxeo en su Unquillo natal, nunca imaginó hasta dónde lo llevaría ese amor por los guantes que descubrió entrenando localmente.
Ahora, con 23 años y el cinturón de campeón amateur argentino en la categoría de 56 kilos sobre sus hombros, “El Indio” —como lo apodan sus pares— aseguró: “Yo quiero ser campeón del mundo”. Y añadió: “Quiero lograr lo que nadie ha logrado, quiero ser el mayor referente del boxeo en la historia argentina”.
Con un ascenso meteórico, Santiago brilló durante todo el desarrollo del Torneo Nacional Amateur, venciendo primero a Miguel Reales por KO y luego a Lucas Consoli en las semifinales. El broche de oro llegó el pasado viernes 1° de noviembre, cuando obtuvo la victoria por puntos contra el favorito, Williams Décima, en una gran final celebrada en el Núcleo de Innovación y Desarrollo de Oportunidades de Puerto San Julián (Santa Cruz).
“Fue muy satisfactorio. Era una barrera que quería romper. Lo único que me interesaba en mi carrera era salir campeón argentino”, comentó el joven deportista. Cabe destacar que todo Unquillo se alborotó al enterarse de su triunfo, y no es para menos.
Ahora, además de ser conocida como la “Cuna de artistas”, la localidad puede jactarse de ser también la “Cuna de campeones”. En el recuerdo quedará el gran recibimiento que tuvo el flamante campeón cuando los Bomberos Voluntarios lo llevaron en caravana por las calles de la ciudad hasta el edificio municipal, donde fue felicitado por el intendente Guillermo Valli y la legisladora Luciana Presas
.“Con sacrificio, esfuerzo, disciplina, pero sobre todo pasión, y el apoyo incondicional de su familia, Santiago viene forjando un camino que le ha dado más que alegrías y lo ha visto alcanzar la gloria a nivel local, provincial y nacional”, manifestó Presas en su momento.
- ¿Cómo empezaste con el boxeo? ¿Quiénes han sido tus mayores referentes?
- Comencé con el boxeo para aprender defensa personal, es decir, para aprender a pelear. Mi papá fue quien me acompañó a anotarme; él también ve mucho boxeo y le gusta. Ahora, si tuviera que definir a mi mayor referente en el boxeo, sin duda sería Floyd Mayweather.
- ¿Cómo fue tu recorrido como boxeador? ¿Quiénes fueron parte de tu equipo en este proceso?
- Empecé a los 16 años tomando clases en un quincho aquí, en Unquillo. Sin embargo, el profe que me entrenaba no pudo seguir, así que me cambié a Argüello Juniors, en Córdoba. Luego, a los 19 años, volví a entrenar en las plazas de Unquillo con un nuevo profe. Dos años después, como este profe tampoco podía continuar entrenándome, me recomendó seguir mi carrera en "La Brea Boxing", que es donde entreno actualmente, todos los días, desde las cuatro de la mañana hasta las cuatro de la tarde. Además, voy a Mendiolaza y doy clases en El Talar.
- ¿Cómo te preparaste para el Campeonato Nacional?
- Con mi entrenador nos preparamos durante todo el año. Aunque durante algunos meses tuve problemas para entrenar como me hubiera gustado, debido a un tema de transporte, lo mental fue clave. Por supuesto, en el gimnasio lo dimos todo: entrenamos con pesas, mejoramos mi resistencia y trabajamos en todos los aspectos necesarios para llegar a la pelea.
- ¿Qué significa para vos y para tu comunidad ser campeón nacional?
- Fue muy satisfactorio. Era una barrera que no podía romper y cuando por fin se dio, cuando por fin llegué a esa meta, sentí una tranquilidad enorme. Realmente quería ser, por lo menos, campeón amateur argentino. Después, como unquillense, me siento orgulloso. Como me recibieron fue muy lindo, me esperó mucha gente.
- ¿Cuáles son tus puntos fuertes como boxeador y cuáles son los aspectos en los que tenés que trabajar más?
- Mi punto débil es dudar mucho a la hora de pelear. Si tirar un gancho o mantener la defensa alta. Son cosas que estamos trabajando con mi entrenador. “Pensá menos y peleá más”, me aconseja con frecuencia. Por fortuna, a este nacional lo encaré con otra mentalidad. Sólo quería pegar, quería hacer que cada punto valiera y por suerte salió bien. En cuanto a mis puntos fuertes, creo que es mi recto derecho a la panza. También es fuerte mi mentalidad. “En el ring soy el más fuerte y el más rápido, nadie puede ganarme”, pienso. Me ayuda mucho el saber que no me van a ganar. Estadísticamente hace mucho tiempo que no pierdo y no voy a perder, tener eso en mente me ayuda mucho.
- ¿Le das mucha importancia a lo mental?
- Sí, la fuerza mental es muy importante. El profe que tengo ahora me enseñó lo que es “la ley de la atracción”: el querer es poder. En esta vida estamos acostumbrados a no creer que se puede, a pensar que algo es imposible solo porque la mayoría lo ve así. Parece un sueño decir: “Yo quiero ser campeón del mundo” sin ser profesional todavía. Pero estoy seguro de que voy a ser campeón. No se trata de arrogancia, sino de la confianza de saber que así será. Esa es la enseñanza más grande que me dio mi profe. Fue algo que me cambió totalmente la vida; en lo deportivo fue como magia: lo que decís, pasa. Caer en ese gimnasio fue lo mejor que me pasó como deportista.
- ¿Cuánto hay del Santiago en el ring y del Santiago fuera del ring?
- Soy exactamente el mismo dentro y fuera del ring. Soy bastante ordenado, y eso se lo debo al boxeo. No tomo alcohol ni salgo a fiestas porque sé que eso podría perjudicarme. Mis días pasan por entrenar en el gimnasio; me levanto temprano, luego descanso un poco y a entrenar otra vez. Así, sin darme cuenta, toda mi rutina está pensada en el entrenamiento. El boxeo está todo el día en mi vida.
- ¿Qué puertas te abrió este título y cuál es el próximo desafío que te planteás?
- Ahora se me abre una puerta enorme: con suerte voy a poder entrenar con la Selección Argentina y en su campus. Era una puerta que estaba esperando. Es una gran experiencia porque podré entrenar con los mejores de la Argentina. Mi idea no es quedarme en lo amateur, quiero ser profesional. Ahora voy a realizarme los estudios correspondientes para comenzar. Quiero ser el campeón del mundo, es el sueño que persigo desde que comencé como amateur. Quiero lograr lo que no logró nadie, quiero ser el mayor referente que hubo en la historia del boxeo argentino.
