miércoles, 29 de agosto de 2018

YAZMÍN MARZO: “Entrenar con Las Toritas es Como Llevarme un Trofeo a mi Casa”


El sitio web "CERCA DEL RING" publicó la nota de Yésica Palmetta a Yazmín Marzo, que reproducimos a continuación.

Desde Villa María, con el bolso lleno de ilusiones y tras obtener el cinturón de campeona provincial dos días previos al viaje, Yazmín Marzo, de 23 años, con un prontuario de 10 pelas ganadas, 1 empate y 1 derrota, llegó a las instalaciones del CENARD en Buenos Aires, el lunes 20 de agosto. Allí estuvo una semana concentrada junto a la Selección de Boxeo Amateur Femenino de mayores, más conocida como “Las Toritas”, a modo de prueba y vinculación con el cuerpo técnico.
Dada la escasa competencia que hay para las chicas, se ha decidido pasar a convocar talentos para agrandar el equipo y así, al menos, puedan sumar guanteos de calidad entre ellas. Sobre todo en lo que respecta a la categoría de Lucia Pérez, los 69 kilogramos, en la que no proliferan contrincantes. Por eso, la joven púgil cordobesa, se sumará a la línea de dicha categoría.
Estuvimos allí, en el comedor del Ce.N.A.R.D-, a la espera de Yazmín Marzo, en la primera mesa frente a la puerta, para que nos viera. Había terminado el primer turno de la mañana, así que debía cambiarse. A nosotros mientras, nos mataba la intriga por saber cuál era el apodo. Se había implantado la duda tras el campeonato Nacional, donde el público alentaba a su boxeadora al grito de “Máquina del mal”, pero en ningún lado ha sido nombrada de ese modo. Sí, como “Huracán”…
- Tenes varios apodos; huracán, niña de oro, y se sumó máquina… ¿Puede ser?
- Sí, me lo han puesto en el nacional: La Máquina del Mal.
- Bien, confirmado, entonces, el nuevo sobrenombre ¿Cómo surgió? ¿Quién te lo puso?
- Cuando llegué al Campeonato Nacional (éste año en Mayo, allá en Córdoba), todo el mundo se sorprendió por lo grandota que era. Fui en 69 kg. y una de mis compañeras más chica, me apodó así por la cantidad de golpes que tiraba o algo así.- ¿Cómo fue el paso del Kick Boxing al boxeo?
- Bueno, en realidad, ese ha sido uno de los pasos más importantes que di en mi carrera. Son dos cosas diferentes; el agua y el aceite. Y de haber hecho once años Kick Boxing, ser campeona del mundo a pasar a comenzar de cero en el boxeo, es algo que hoy día no me arrepiento. Inclusive cuando tenía 16 años dejé de boxear por hacer Kick boxing y hoy sí me arrepiento de haber dejado de boxear en aquel entonces. Pero bueno, esta es una nueva etapa y se me están presentando oportunidades bastante buenas.
- Cuando estás sobre el ring en medio de un combate ¿te pasó que te surja el impulso de una patada? Por la costumbre pienso yo…
- No, jamás.
- ¿Por qué decidiste volcarte al boxeo? ¿En qué momento fue?
- Vivía en Córdoba (capital) y me tuve que volver a Villa María, de donde soy. Allí no hay nivel para el kick boxing y decidí dedicarme entonces al boxeo. Me encontré con la oportunidad de poder participar en el Nacional. Durante el 2017 fui bajando de peso hasta dar 65 kg., hice una pelea y empecé a mantenerme desde entonces en categoría. Participe este año del Nacional y a partir de ahí decidí que me voy a dedicar de por vida al boxeo.
- Empezaste desde muy chiquita, a los 13 años. En una entrevista vos decís que comenzaste por tu hermana?
- Mi hermana mayor.
- Bien ¿Y ella es atleta también? ¿Cómo fue todo?
- Ella hacía Kung Fu y me decía que era buena y me llevó a probar sin saberlo. Probé una clase, me gustó y cuando gané el primer sudamericano dije “acá tengo condiciones”. Así que empecé a dedicarme. Tengo cinco hermanos. Con cada uno tengo una relación diferente por lógica. Con la que mejor me llevo en la actualidad es con la más chiquita. Y bueno, a los 19 años debuté como profesional en el Kick Boxing, hice 54 peleas. Tengo el título nacional en semi profesional y título mundial en profesional.
- Tuviste un paso por las Artes Marciales Mixtas ¿Cómo fue esa experiencia?
- Sí, bien. Se dio la oportunidad, fui, hice una pelea que no me fue bien. Creo que estaba mal psicológicamente y fue un bajón, por eso no seguí en la disciplina. Me llamaron para una pelea en Brasil, pero no quise saber más nada. Fue una linda experiencia igual.
- Leí que trabajas para una Organización con fines sociales, que das clases y estudias el profesorado de educación física ¿Cómo te organizas para poder cumplir con todo?
- Sí, uff (risas) mis días son eternos. De la mañana a la tarde curso en la facultad, de ahí tengo el taller de inclusión social, una o dos veces a la semana, en horarios rotativos, dependiendo de cómo nos acomodemos. Por la noche doy clases en el gimnasio todos los días.
- ¿De qué se trata ese trabajo social al que te dedicas?
- Lo que estamos tratando de hacer, justamente desde lo que se llama la oficina de inclusión social, es incluir a la gente mediante el deporte para que salgan de la droga, la situación de calle, entre o tras cosas y que tengan una nueva oportunidad. Mi labor es desde lo deportivo.
- Desde tu aparición en el certamen nacional, tu nombre junto a tu estilo, empezó a circular, hasta desembocar en la cita a entrenar con Las Toritas ¿Cómo vivis este momento?
- Uh, es inigualable. Es algo que me lo llevo a mi casa como un trofeo.
- ¿Quién te llamó para la convocatoria? ¿Te lo esperabas?
- En realidad, me decían que no tenía más contrincantes, que me iba a tener que pasar a profesional. A lo que dije que no, que quería tratar de entrar a la selección. De ahí me escucharon los entrenadores de Córdoba, quienes le mencionaron a Yusmanis mi nombre y él me citó.
- ¿Cómo viviste el Nacional como tu primera competencia en el boxeo? ¿Y cómo lo comparaste con tu experiencia en el Kick Boxing?
- La verdad que fue inolvidable. Me tocó pelear tres veces y en cada oportunidad era dejar todo: yo quería la de oro, no me importaba nada.
- Por lo que sé, ya te conocías con las hermanas Sánchez (Leonela y Dayana) ¿Cómo se conocieron?
- La primera vez que fui a entrenar a la Asociación de técnicos allá en Córdoba, conocí a Juliana Basualdo. Con ella me volví a Villa María ese día. En el camino me dijo de pasar a saludar a Leonela Sánchez. Fuimos a su casa, yo estaba re contenta por conocerla, la verdad que nos atendió re bien. Y ahí comenzó nuestra relación.
- ¿Cómo te recibió el equipo de Las Toritas?
- Bien, la verdad que bien. Al principio medio que me sentía que no encajaba mucho, pero después bien. Es un gran equipo y me pone muy feliz que me hayan recibido así.
- ¿Cómo fue la devolución de los profes en esta semana de entrenamiento?
- Bastante positiva: les gusta mucho lo que hago y me mencionaron constantemente que soy una boxeadora muy fuerte, pero lógico hay varias cosas por corregir.