"LA VOZ DEPORTIVA" publicó la nota de Carlos Ludueña a Hugo Ruffino, que reproducimos a continuación.
Hugo Ruffino, el "gringo" nacido en Colonia Eustolia hace 60 años, mantuvo un rico diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO, en el que exhibió su felicidad y satisfacción por la tarea que lleva a cabo junto a su grupo de colaboradores, aunque alertó sobre la falta de una regular competencia que conspirará de manera letal contra la actividad profesional.
- ¿Cuáles son las actividades en el gimnasio?
- De lunes a viernes de 16 a 20 estamos con el grupo de competición, después tenemos turnos para el boxeo recreativo los lunes y miércoles de de 20 a 21.30 y martes y jueves de 13.30 a 15, que hoy esa franja horaria debido a las altas temperaturas de verano no está funcionando. Sí en cambio en otras épocas del año hay una nutrida concurrencia.
- ¿Estás acompañado por un grupo de trabajo?
- Hoy estamos manejando un grupo de aproximadamente 40 boxeadores, cuya mitad ya tiene la licencia para pelear. Para eso contamos con la colaboración de Luis Montenegro, Simón Valentini, Jeremías Gudiño, Sebastián Echenique y Adolfo Robledo, que aunque se retiró sigue dando una mano con sus sabios consejos.
- Don Adolfo no se rinde...
- Vale destacar que todos estos chicos que están boxeando lo hicieron gracias a Adolfo Robledo porque lo que renegó el viejo fue mucho, entrenando en diferentes lugares, siempre con recursos propios, así mantuvo al boxeo local. Incluso con el profesor y director de Deportes, Juan Iturburu queríamos que el gimnasio se llamase "Adolfo Robledo", pero legalmente al estar en vida no se puede por tratarse de una repartición pública, sí en cambio en edificios privados se puede.
- Cuentan con un buen plantel de boxeadores profesionales...
- Contamos con 5 profesionales, tres que están bajo mi dirección técnica que son Pablo Villanueva, Roque Juncos y Roberto Gutiérrez, y los otros dos que están a las órdenes de Sebastián Echenique como Diego Luque que es Campeón Latino y Gustavo Urquía que el 21 de este mes peleará por el título latino de su categoría en Puerto Madryn.
- ¿Se puede aseverar que estás satisfecho con la tarea que venís cumpliendo?
- Realmente tenemos un grupo bárbaro de profesionales y excelentes personas, y en lo que respecta a mis pupilos tengo muchas esperanzas. La verdad que soy muy feliz dirigiendo este gimnasio, me considero un privilegiado por hacer lo que me gusta. Acá se tienen todas las comodidades, un gimnasio que tiene a su disposición el plantel de profesores de educación física, nutricionistas, y hasta Juan Iturburu una persona muy capacitada en esta disciplina, por ejemplo maneja muy bien la parte del vendaje en los profesionales que no es nada sencillo.
- ¿Sentís que sos un buen entrenador?
- Hago todo para ser el mejor, pero con esto no quiero decir que lo sea. Me capacito, por ejemplo hablo con traumatólogos porque el vendaje que se hacía antes no sirve, entonces hago todo para mejorar. Y en la parte humana trato de ser el mejor compañero de mis pupilos. Además trato de transmitir mi experiencia en el boxeo donde hice 60 peleas como amateur y unas 25 como profesional en la categoría crucero.
Antes de abrir el gimnasio fuimos con Iturburu a capacitarnos al gimnasio "Amilcar Brusa" cuando el maestro estaba en vida. Después seguí capacitándome en lugares como Rafaela, Santa Fe, Buenos Aires, porque en el boxeo hay que actualizarse permanentemente, siempre aprendiendo algo nuevo, no te podes quedar por lo que viste, no es que el boxeo cambió porque los golpes siguen siendo cinco, pero varía la cantidad, la intensidad y un montón de cosas que viene atrás de eso.
- ¿Qué opinión te merece el boxeo local?
- Como decía tenemos un Campeón Latino como Luque, a Urquía que va a pelear por el título y tiene grandes posibilidades de ganarlo, a Roque Juncos que va andar. Después hay muy buenos proyectos juveniles.
- ¿Entonces miras con buenos ojos el futuro?
- No, hay un problema, es que se está acabando el boxeo profesional en San Francisco. Cuando dejen los pocos que hay, no hay detrás un semillero, va a llevar 4 a 5 años poder formar nuevos profesionales.
Todo como consecuencia de la falta de competencia, hay muy buenos valores pero después no tienen la continuidad necesaria de peleas y terminan dejando, eso ya le pasó a Robledo. Y acá tiene que ver el alto costo que tiene organizar un festival, sale mucha plata. Es algo que todos los que estamos en este deporte debemos empezar replantearnos.