Tras su consagración, Nazarena Romero hablo para "T Y C SPORTS" y señaló: "Muy agradecida a Dios, a mi familia que me apoya, gracias a Gilberto Mendoza (presidente de la A.M.B.) por está oportunidad, a Carlos Tello, a Sampson Lewkowicz (entre otros), y a toda mi familia".
Luego, dijo que "sufrí, lo que me hizo sufrir (la rival), todo lo que entrené para enfrentar a esta guerrera. Fue mucho sacrificio para todo esto".
Prosiguiendo, sostuvo: "Ahora hay que entrenar más duro. Empieza una nueva vida".
Y cerró, agradeciendo: "Gracias a mis sponsors, a todo la gente que me apoyó, gracias a La Quiaca (Jujuy), Recreo (La Paz), Catamarca y Córdoba".
Por su lado, al diario catamarqueño "EL ESQUIÚ", "Capricho" le hizo las siguientes declaraciones:
"Tuve una mexicana, pegaba fuerte pero me propuse a disfrutar, no tenía que devolverle nada a nadie así que pude disfrutar la pelea, ser libre, me solté. Fui feliz, 'usé el flow' como me dice mi coach".
"Fueron semanas duras de mucho sacrificio, así que era disfrutar".
"Van para mi casa", fue su respuesta al ser consultada sobre los guantes que usó en el combate. "Si hubiese estado viva mi vieja van para mi mamá", mencionó.
"Sé que no estuve peleando sóla arriba, que estuve con Dios y obviamente mi mamá y mi papá tirandome fuerzas de arriba".
